La «tregua olímpica» terminó y el jefe de Estado debe hacer frente a los resultados de las elecciones legislativas de junio pasado.

El presidente de Francia anunció que Emmanuel Macron esperará hasta el próximo fin de semana antes de dar un primer paso hacia el nombramiento de un primer ministro, salido de la nueva correlación de fuerzas en el Legislativo, tras los comicios de hace varias semanas.

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Un anuncio de la Presidencia francesa da cuenta que el jefe de Estado invitó a los presidentes de los grupos parlamentarios y a los líderes de los partidos representados en el Parlamento a “una serie de intercambios” el 23 de agosto.

De acuerdo al comunicado de prensa, «el nombramiento de un primer ministro se producirá como continuación de estas consultas y de sus conclusiones».

En concreto, Emmanuel Macron recibirá sucesivamente, durante la jornada del 23 de agosto, a los líderes de cada familia política: «Quienes hayan manifestado el deseo de venir en formato grupal podrán hacerlo», especifican desde el entorno del Presidente francés.

Es el caso del Nuevo Frente Popular (NFP), que será recibido primero, porque “se propuso recibir por orden de importancia de los bloques en la Asamblea Nacional ”, al resultar la primera minoría en las elecciones.

La candidata de la izquierda a la jefatura de Gobierno, Lucie Castets , debería formar parte de la delegación, a petición de los responsables del NFP: «El presidente obviamente no se opone si se trata de una petición colectiva y las fuerzas políticas del NFP consideran que es útil que el intercambio sea constructivo», trascendió desde el Palacio del Elíseo.

La ultraderechista Agrupación Nacional , aunque regularmente excluida del “campo republicano” por el presidente, también está invitada.

El objetivo de Emmanuel Macron sigue siendo la formación de una coalición capaz de gobernar, mientras que en las elecciones legislativas anticipadas del 30 de junio y el 7 de julio no se obtuvo una mayoría clara.

Se trata “de seguir avanzando hacia la constitución de la mayoría más amplia y estable posible al servicio del país”, escribe la Presidencia en su comunicado.

“Los franceses expresaron durante las elecciones legislativas un deseo de cambio y de amplia unidad. Con un espíritu de responsabilidad, todos los líderes políticos deben trabajar para implementar este deseo».

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